martes, 25 de noviembre de 2014

John Williams: Stoner. Por Javier Sánchez Villegas

Williams, John: Stoner. Baile del Sol, Tenerife, 2010 (edición original de 1965). Colección "Narrativa" 121. 240 páginas. Traducción de Antonio Díez Fernández. Comentario realizado por Javier Sánchez Villegas.

Pues sí, me ha cautivado. Me ha dejado de piedra. Es buenísimo. No encuentro palabras. Me regalaron este libro hace un par de meses y no me sentía con ánimos de leerlo. Sin embargo, aprovechando un viaje, lo empecé y no pude parar de leer hasta terminarlo. ¿De qué va este libro? Pues va de la vida de un hombre normal y corriente, de un hombre que sueña con vivir tranquilo, con montar una familia, trabajar y ser feliz. Así, sin más.

"William Stoner entró como estudiante en la Universidad de Missouri en el año 1910, a la edad de diecinueve años. Ocho años más tarde, en pleno auge de la Primera Guerra Mundial, recibió el título de Doctorado en Filosofía y aceptó una plaza de profesor en la misma universidad, donde enseñó hasta su muerte en 1956. Nunca ascendió más allá del grado de profesor asistente y unos pocos estudiantes le recordaban vagamente después de haber ido a sus clases. Cuando murió, sus colegas donaron en su memoria un manuscrito medieval a la biblioteca de la Universidad".

lunes, 17 de noviembre de 2014

Jean Vanier: La fuente de las lágrimas. Por Javier Sánchez Villegas

Vanier, Jean: La fuente de las lágrimas. Un retiro de alianza. Sal Terrae, Santander, 2004 (edición original de 2002). Colección "El pozo de Siquem" 157. 181 páginas. Traducción de Milagros Amado Mier y Denise Garnier. Comentario realizado por Javier Sánchez Villegas.

Hace ya algún tiempo, Jean Vanier fue invitado a ir a Santo Domingo a dar un retiro, el retiro de la Alianza de El Arca. Las palabras que pronunció tocaron el corazón de muchas personas, hasta el punto de que las transcribieron. Como consecuencia, y tras una revisión elaborada por Anne-Sophie, una amiga de El Arca, esas palabras de Vanier se convirtieron en un libro, en este libro.

Al comienzo de la obra, Jean Vanier se plantea lo siguiente: "¿Dónde se encuentra la fuente de las lágrimas? ¿De dónde vienen esas aguas que afloran repentinamente a la superficie de nuestra persona y que no podemos contener? Agua ardiente del dolor, agua amarga del remordimiento, agua dulce de la compasión, agua tranquilizadora del arrepentimiento y el consuelo, agua burbujeante de la alegría...; las lágrimas brotan cuando algo en nosotros se siente profundamente conmovido. Cuando estamos estremecidos o destrozados por el sufrimiento, por supuesto, pero también cuando nos sentimos afectados por el dolor ajeno, emocionados por la debilidad del otro, sobrecogidos por su angustia, o cuando estamos emocionados por el reencuentro, por el amor recibido o por el perdón otorgado. Cuando nuestros corazones de piedra se fisuran, brotan de ellos agua, como de la roca de Meribá brotó agua en el desierto (Ex 17,6). ¿De dónde nacen las lágrimas sino de lo más profundo y secreto de nuestro ser?".

martes, 11 de noviembre de 2014

Luis González-Carvajal: Esta es nuestra fe - Texto

Os presento una antigua leyenda noruega que nos puede ayudar a entender el llamado "silencio" de Dios. En último término, es una llamada a no maltratar el misterio.

"El viejo Haakón cuidaba una cierta ermita. En ella se conservaba un Cristo muy venerado que recibía el significativo nombre de "Cristo de los Favores". Todos acudían a él para pedirle ayuda. Un día, también el ermitaño Haakón decidió solicitar un favor y, arrodillado ante la imagen, dijo:
-Señor, quiero padecer por ti. Déjame ocupar tu puesto. Quiero reemplazarte en la cruz.
Y se quedó quieto, con los ojos puestos en la imagen, esperando una respuesta. De repente -¡oh, maravilla!- vio cómo el Crucificado comenzaba a mover los labios y le decía:
-Amigo mío, accedo a tu deseo; pero ha de ser con una condición: que, suceda lo que suceda y veas lo que veas, has de guardar siempre silencio.
-Te lo prometo, Señor.
Y se efectuó el cambio. Nadie se dio cuenta de que era Haakón quien estaba en la cruz, sostenido por los cuatro clavos, y que el Señor ocupaba el puesto del ermitaño. Los devotos seguían desfilando pidiendo favores, y Haakón, fiel a su promesa, callaba. Hasta que un día...

lunes, 3 de noviembre de 2014

101 Cuentos clásicos de la India. Por Javier Sánchez Villegas

101 Cuentos clásicos de la India. La tradición de un legado espiritual. Recopilación de Ramiro Calle. Edaf, Madrid, 1995. Colección "Arca de Sabiduría" 16. 128 páginas. Comentario realizado por Javier Sánchez Villegas.

En alguna ocasión he dicho que normalmente somos nosotros los que elegimos los libros. Sin embargo, a veces ocurre que son los libros los que eligen a sus lectores. Eso es lo que me ha pasado con esta obra. Al lado de casa de mi madre en Cáceres hay una librería-papelería regentada por una amiga mía de toda la vida. Al entrar para saludarla, este libro cobró vida y salió a mi encuentro. No pude resistirme a comprarlo. La mística, la India, los cuentos... me han seducido.
Al empezar a leer la introducción, escrita por Ramiro Calle (Director del Centro de yoga "Shadak" de Madrid), algo ha vibrado por dentro. 
Es cierto que "desde tiempos inmemoriales, la India ha sido tierra de renombrados maestros espirituales, sabios, místicos y yoguis. Es la patria del hinduismo, el budismo, el jainismo y el yoga y el lugar de nacimiento del Buda, Mahavir, Tilopa, Shankaracharya, Ramakrishna y Ramana Maharshi, entre tantos otros. No es casual, por tanto, que tenga una herencia espiritual y cultural de excepción, habiendo aportado una magnífica literatura mística que incluye los Vedas, los Upanishads, el Ramayana, El Mahabharata, El Dhammapada y otros fabulosos textos".